Cuando alguien está siendo asaltado, el consejo común es simplemente entregar la billetera para que las cosas no empeoren. Después de todo, las tarjetas de crédito se pueden cancelar, los teléfonos se pueden bloquear y las perdidas reales son mínimas.
Algunas empresas adoptaron la misma respuesta al movimiento de liberación animal. Cuando los activistas aparecieron con pancartas y megáfonos, algunas empresas acordaron firmar el compromiso para hacerlos desaparecer. Pero no es un atraco de una sola vez. Estos apaciguamientos menores han llevado al hostigamiento regular de los grupos activistas. Y cuando las empresas han encontrado que no son reales para ser implementadas, estos grupos han redoblado sus campañas de acoso.
Para comprender por qué los compromisos externos pueden no ser lo menor para una empresa, primero debemos comprender cómo comenzaron estos compromisos, por qué son tan difíciles de cumplir, qué significa cuando las empresas no cumplen y cómo deben responder las empresas.
La trampa de compromiso
Las campañas de firmar por un compromiso, se han vuelto comunes en las redes sociales. Dirigidas por Change.org y otras plataformas de peticiones en línea, las promesas son una forma de llamar la atención sobre un problema sin hacer nada para cambiarlo.
Pero no ocurre lo mismo con el movimiento por los derechos de los animales y su esfuerzo por asegurar compromisos corporativos. Durante décadas, los activistas por la liberación animal han presionado a las corporaciones para que hagan declaración públicas sobre sus planes para pasar de la proteína animal de origen tradicional a cualquier otro estándar humanitario que estuviera de moda en ese momento.
Para las empresas, parecía una victoria fácil. Esquivar a los activistas comprometiéndose a hacer algo en los próximos 10 años y luego lo deja botado por el camino.
Pero aparentemente esta estrategia solo alimenta a los activistas de los animales. Los activistas aceptan promesas de una empresa y las utilizan para intimidad a otras empresas sobre el mismo tema. También vuelven al objetivo original con más peticiones, sabiendo que la empresa ya ha cedido una vez.
La presión activista enfoca las mentes en corto plazo. Ahora, algunas empresas se han dado cuenta de que prometieron algo imposible.
Seguimiento imposible
El objetivo de movimiento de liberación animal, no es mejorar modestamente la calidad de vida de los animales de granja; es la abolición de todos los productos animales. Estas promesas se construyen con ese objetivo en mente.
Considere las promesas tempranas de usar carne de cerdo “libre de jaulas”, es decir, carne de cerdo de granjas donde las cerdas no fueron alojadas en corrales de maternidad individuales. (Consulte el resumen del problema: Alojamiento para cerdas para obtener mas información sobre este tema).
Algunas empresas, incluidas McDonald’s, expresaron públicamente el objetivo de utilizar carne de cerdo libre de jaulas y se comprometieron a hacerlo en el 2012. Pero en el 2012, casi ningún proveedor porcino del país producía carne de cerdo que cumpliera con este estándar diferente. Una década después y el suministro de carne de cerdo libre de jaulas no es mucho mayor. El costo de obtener el producto hacía imposible cumplir con el compromiso. Esto condujo a una segunda ronda de acoso, ya que los activistas atacaron a McDonald ́s con una campaña por delegación, que McDonald’s ganó cómodamente. (Consulte el estudio del caso: McDonald ́s).
Por supuesto, McDonald ́s no es está solo. Subway, Burger King, Costco, Safeway y otros hicieron promesas similares casi al mismo tiempo. Y cada uno ahora enfrenta una reacción violenta anual de los activistas por no cumplir con las demandas de sus promesas imposibles.
Estas son algunas de las empresas que han sido blanco de compromisos fallidos en los últimos años:
- En el 2012, La sopa Campbell ́s prometio eliminar los corrales de maternidad de su suministro de carne de cerdo para el 2022. Pero desde el año pasado, ninguna de sus carnes de cerdo se produce sin el uso de corrales de maternidad. La compañía también prometió en el 2016 obtener 100% de huevos libres de jaulas para el 2025, pero los indicadores recientes muestran que la compañía tiene un porcentaje aun menor de productos libres de jaulas en el 2022, que en el 2018.
- Panera Bread ya no cumplió su objetivo de estar completamente libre de jaulas para el 2020. Luego extendió su fecha límite hasta el 2025, pero las cosas no han ido bien. El porcentaje de huevos libres de jaulas fue más bajo en el 2021 que hace cinco años atrás.
- En el 2012, Jack In The Box prometió eliminar los carrales de maternidad de su suministro de carne de cerdo para el 2022. Pero para el 2019, la empresa elimino la promesa de su sitio web y declaro que estaba “discutiendo” el problema con los proveedores de carne de
cerdo.
Bienestar animal y medio ambiente
Los activistas por los animales constantemente cambian las reglas del juego. Cuando las empresas de alimentos ceden a las demandas, los activistas los atacan con más fuerza. Alimenta un ciclo de presión. Perdidos en el bullicio esta el fundamento: ¿Estas políticas son buenas para el medio ambiente y el bienestar animal?
Las promesas exigidas por los activistas tienen consecuencias negativas para el medio ambiente y los esfuerzos de sostenibilidad, así como para el bienestar animal. Consulte nuestro boletín informativo sobre alojamiento para cerdos y antibióticos para ver más ejemplos.
La mayoría de los activistas por los derechos de los animales no tienen experiencia en medicina veterinaria o ciencia animal. No entienden cómo ciertas prácticas pueden mantener a los animales seguros y saludables. Las decisiones sobre lo que constituye un estándar humano deben dejarse en manos de expertos, no de campañas de presión.
Conclusión
Considere los siguientes puntos:
- Los activistas por los animales quieren eliminar todas las proteínas animales, sin importar cómo se produzcan.
- Los activistas por los animales utilizan campañas con técnicas engañosas para impulsar a las empresas a hacer promesas.
- Las promesas están resultando imposible de cumplir.
Esta es la lección: no cave su propio hoyo. Si los activistas vienen llamando, ignórenlos.